LAUDITH CECILIA GALVIS CASTAÑEDA
PSICOLOGA – ESP. PREVENCION DEL MALTRATO INFANTIL – ESP. NEUROPSICOPEDAGOGIA

Hace cuatro años Cuando mis amigas y socias Mónica y Adriana, me hablaron por primera vez del proyecto educativo llamado Reuven Feuerstein, me invitaron a participar en él, como una forma de enriquecer y trascender en nuestra practica profesional, consolidando un proyecto de vida hacia el emprendimiento solidario, proporcionando una alternativa novedosa, con una trasformación pedagógica desde la práctica en el sistema escolar de la región, en un principio estuve escéptica y un poco incrédula al pensar que la propuesta era muy arriesgada y ambiciosa, pero al ir enterándome de los objetivos, la fundamentación teórica y pedagógica, de todas las implicaciones de integralidad a favor del neurodesarrollo y el aprendizaje significativo, observe la gran innovación educativa y el impacto positivo que se podía producir en los niños y niñas de la ciudad de Neiva, es por ello que tome la decisión de hacer parte de esta propuesta maravillosa, con la firme convicción de ofrecerle a las familias de la ciudad una opción educativa para sus hijos, que incorpora de forma sistemática y planificada practicas trasformadoras, orientadas a mejorar los procesos de enseñanza y aprendizaje.

LAUDITH CECILIA GALVIS CASTAÑEDA

Al tiempo que me incorporaba como directiva y al tener la certeza del futuro éxito de este proyecto educativo, decidí hacerlo también como familia, al vincular a mi hija Juanita, que en ese entonces acababa de cumplir sus dos añitos de edad, iniciando en el grado párvulos, desde entonces y hasta la fecha, mi familia y yo estamos felices y orgullosos de nuestra Juanita, al observar todos sus logros y grandes avances a nivel cognitivo, social y emocional, además estamos agradecidos con todo el equipo de trabajo que hace parte del colegio, entre los que se cuentan docentes, administrativos y directivos, por toda la disposición, profesionalismo, entrega y dedicación, que permanentemente muestran en la formación de mi hija y de todos los niños que hacen parte de la institución.
El colegio Reuven Feurestein, ha permitido que mi hija y todos los niños que lo integran, pasen de un aprendizaje basado en la memoria, hacia uno que realmente tiene significado y es aplicable a su realidad y al contexto donde se desenvuelven, que abran sus mentes a nuevas posibilidades, que potencien sus conocimientos en un entorno altamente creativo, tecnológico y en constante trasformación.
En lo personal considero que este gran proyecto me ha permitido crecer como empresaria, ampliando mi visión frente a la apertura de aceptar retos, innovación y la adopción de nuevos saberes y procedimientos, que marquen la diferencia en procura de aportar soluciones a una sociedad en constante cambio, así mismo a nivel profesional he reconfirmado a través de la comprobación y la práctica, la importancia de brindarle a los niños y niñas, la oportunidad de recibir experiencias educativas, que modifiquen de forma positiva la estructura del funcionamiento cognitivo en el aprendizaje, obteniendo como resultado de ello seres humanos felices, con las capacidad para responder satisfactoriamente a las nuevas demandas de la sociedad actual.
Al realizar una retrospectiva detallada de todas las experiencias vividas en estos cuatro años, me doy cuenta que fue una decisión totalmente acertada; la inseguridad que alguna vez existió, fue remplazada por una firme convicción de nuestro modelo y practicas pedagógicas, una máxima confianza hacia la comunidad educativa, que está en constante edificación de sus saberes y potencialidades, con el objetivo de dar lo mejor en el aula, y un fuerte propósito de seguir trabajando con el corazón para brindar el apoyo, acompañamiento y servicio, a cada una de las familias que día tras día acuden a nuestro maravilloso colegio Reuven Feuerstein.